significado del ascendente Cáncer y Leo

Tu Ascendente en Cáncer

Tener un ascendente en cáncer significa que en el momento de tu nacimiento, ascendió el signo de Cáncer también conocido como el signo del hogar y de la madre. Esto te hace sensible a los sentimientos de los demás, y te otorga la habilidad de captar rápidamente el más mínimo cambio de humor. Cuando se trata de un ser querido, o las circunstancias te obligan, sabes adaptarte a ese cambio de humor para satisfacer las necesidades de la otra persona.

Para i, la vida es principalmente, una experiencia que hay que vivir y sentir y en la que te encuentras a ti mismo, unas veces arriba y otras abajo. Buscas de tus amigos y compañeros consejo y guía. Quieres de tu pareja que sea capaz de darte una perspectiva global, una imagen completa de las situaciones y las cosas. Dependes del consejo tranquilo y disciplinado de un buen administrador, que es lo que acaban siendo tus compañeros muchas veces. Eres la persona en la que los demás confían.

Por ora parte, te cuesta decir que no a lo que te piden, y ello puede hacer que, en ocasiones, tengas que soportar una pesada carga.
Estás marcado por una gran sensibilidad que se convierte fácilmente en timidez. Eres impresionable, y experimentas con fuerza todas las sensaciones provenientes del exterior.

Te gusta la comodidad y las costumbres hogareñas. Sin embargo, y aunque parezca contradictorio, tienes ganas de vivir aventuras y sientes el imperioso deseo de viajar lejos, sobre todo por mar.

Eres bastante reservado y un poco esquivo, debido sobre todo a tu sensibilidad que te vuelve fácilmente susceptible (sientes bastante miedo a hacer el ridículo). Tienes demasiada tendencia a creer que se te quiere perjudicar y ello te lleva a enfrentarte a personas que no quieren perjudicarte.

Vives más pensando en el pasado que en las realidades del presente.
A pesar de tu natural timidez, sabes ser tenaz como el agua que erosiona pacientemente las rocas más duras: las desgasta, las pule y termina venciéndolas. Es el arma más poderosa que posees y que te permitirá superar todos los obstáculos.

signo de leo

Tu Ascendente en Leo

Con el Ascendente en Leo, un signo de fuego, eres vivaz, espontánea y optimista. También un poco orgullosa. Aparentemente, no te falta confianza en ti misma y en tu propia visión del futuro, y sientes la necesidad de expresarte y manifestar tu energía en el mundo. Tienes un carácter generoso y eres amable con los demás, aunque, sin duda, aprecias ser reconocida por ello.

Te gusta estar en el centro, porque sientes la necesidad de expresarte dramáticamente y llamar la atención. Por el otro lado, sabes transmitir tu entusiasmo y tu vitalidad a tu entorno y, de esta manera, animar a la gente y dar vida a proyectos.

Prefieres un compañero con grandes ambiciones y planes, capaz de soñar lo imposible. Las relaciones de persona a persona aparecen ante ti como un campo de entrenamiento para aprender a compartir y promover objetivos comunes, con lo cual neutralizas la tendencia que posees a centrarte demasiado en ti misma.

Posees un carácter noble y un profundo desprecio por todas las bajezas y mezquindades, las cuales consideras que son refugio de los mediocres. Posees una fuerte naturaleza; por ello, sueles ser bastante despreciativa. Tus ataques de cólera pueden ser intensos y lo derriban todo a tu paso, pero no son duraderos, y olvidas y perdonas fácilmente.
Tienes una cierta necesidad de brillar que, a veces, puede hacer que los demás piensen que buscas los gestos más afectados y las actitudes más teatrales. Te gusta ayudar a los demás, ser útil y hacer buenas obras, pero quieres que las personas a las que ayudas se den cuenta de ello y que no parezcan ignorar que te lo deben todo.

Por regla general, otorgas tu confianza a los que consideras dignos de ella. Eres justa con las personas a las que pides servicios, y nunca exiges cosas imposibles. Cuando haces el bien, es sin cálculos, y sin preocuparte por saber si sacarás algún provecho. Sólo te importa el agradecimiento, el aumento de prestigio. A veces puedes mostrar una actitud extremadamente distante debido a esa inmoderada necesidad de respeto y a ese aire de dignidad.